- El bastidor.
- Pinceles.
- Material básico para pintar al óleo.
Habitualmente el dibujo sobre el lienzo se realiza con carboncillo, por un motivo muy sencillo, es un medio que se puede borrar con facilidad (pasando un paño por encima a modo de goma de borrar arrastraremos el carbón), incluso con el dedo -siempre que está limpio, claro-. Esto nos sirve para no deformar la tela, ya que nos permite realizar el dibujo sin incidir demasiado sobre la superficie.
Por supuesto, podremos utilizar también lápiz de grafito, incluso sanguina, siempre sin apretar para no deformar la tela. No es nada recomendable hacer el dibujo con bolígrafos o rotuladores, ya que en contacto con pinturas y disolventes al óleo reaccionan de formas indeseadas y pueden estropearnos el cuadro.
Los pintores experimentados gustan también de dibujar directamente con el pincel sobre el lienzo en blanco (al final del post hay vídeos para admirar su habilidad).
1. Deberemos tener claro qué queremos pintar, por eso es interesante realizar bocetos previos en papel, así nos haremos una idea clara del tamaño del cuadro, qué elementos queremos destacar, qué elementos vamos a eliminar, etc, etc.
2. Pasamos al momento de encajar la imágen en el cuadro, de ahí que nos será tan últil los dibujos anteriores (estos consejos solo son orientativos, ya que cada arista sigue procesos personales según sus habilidades o gustos). Para encajar, bastará con hacer suaves trazos que nos orienten sobre cada una de las cosas que contendrá el dibujo. Paulatinamente iremos haciendo el dibujo más exacto hasta conseguir la base que deseamos.
3. Es interesante fijar el carboncillo o el lápiz, esto sirve para evitar que se borre el dibujo antes de lo deseado. También sirve para que no se disuelva con la esencia de trementina. Existen fijadores en expray el mercado que son de calidad., son líquidos Basta con aplicar un par de capas para garantizarnos que el dibujo estará ahí durante todo el proceso.

A continuación veremos parte de este proceso gracias al pintor Salvador Bernabeu, que ha publicado el paso a paso en su blog:



- Por una parte daremos consistencia al cuadro, consiguiendo que toda la superficie esté cubierta de color. Tengamos en cuenta que la pintura al óleo requiere de varias capas para tener cierta calidad, evitaremos así futuras transparencias y conseguiremos que el los óleos sean estables a lo largo de los años. Los colores al óleo no son opacos como los acrílicos, tienden a transparentar, necesitan de varias capas para consolidarse de forma adecuada.
Si aplicásemos sobre el lienzo crudo una capa gruesa de óleo, con el tiempo es muy probable que se agriete y aparezcan los temidos craquelados.
- Por otra parte, la mancha nos irá dando una idea aproximada de las tonalidades que queremos utilizar, nos permitirá acentuar los colores más oscuros, etc. Eliminaremos el blanco del lienzo que puede desvirtuar nuestra visión del color que deseamos conseguir.

Ahora veremos el mismo proceso, se trata de un cuadro de la pintora Pilar López Román, que también nos muestra claramente los pasos seguidos:




Llegado a este punto, hemos de recordar que cada pintor es un mundo, hay pintores que necesitan un dibujo detallado antes de iniciar un cuadro y hay otros que dibujan directamente con el pincel y van "improvisando" y corrigiendo sobre la marcha. Todas las técnicas son válidas, siendo conveniente garantizar la durabilidad del trabajo.
He elegido varios vídeos que pueden ser ilustrativos:
Espero que les guste.