miércoles, 30 de marzo de 2011

Gustave Courbet, más que un provocador

Decía Courbet: «si dejo de escandalizar, dejo de existir», y evidentemente lo hacía. Teniendo en cuenta la época en la que fue pintado, miren este cuadro y sorpréndanse:

El origen del mundo, 1866

¿Han visto algún cuadro tan rotundo?. "El origen del mundo" Es una pintura al óleo sobre lienzo, de unos 55 cm por 46 cm, que representa en primer plano un pubis femenino, el de un tronco de mujer desnudo, reclinado sobre las sábanas de un lecho y que tiene las piernas separadas. La escala, el encuadre y el punto de vista elegidos por el artista supusieron una radical novedad respecto de toda la tradición pictórica anterior, produciendo en el espectador una fuerte impresión de sensualidad y erotismo. (Wikipedia).

Lo que llama la atención de L'origine du monde es el atrevimiento y la franqueza, la ausencia de un pretexto histórico o argumental, sin un guión que lo disculpe, la brutalidad del cercenamiento de piernas, brazos y cabeza de la modelo Joanna Hiffernan, forzando al espectador a situarse en un punto de vista inédito en la historia de la pintura. Nadien antes había pintado así la anatomía femenina, él, simplemente lo hizo, para escándalo de sus contemporáneos.

Algunos le han llamado el tierno revolucionario, una idea más amable de la figura de este pintor.
Como curiosidad diré, que este cuadro está censurado en facebook, gracias que a nosotros no nos ocurra lo mismo.

Han sido muchas las publicaciones que aluden este cuadro y el siguiente que presentamos, de dos mujeres en el lecho titulada "El sueño" como vertientes fetichistas y eróticas. El espíritu transgresor de Courbet sin embargo no debe enmascarar al genio que es considerado como padre del realismo.


"El sueño"


"El sueño" (fragmento)


Pero no podemos quedarnos con la anécdota del trangresor/provovador ya que Courbet supuso mucho más en la evolución de la Historia del Arte. Moderno. Courbet (1819-1877) fue uno de los pintores más importantes del siglo XIX y representa, al lado de novelistas y poetas como Baudelaire, Balzac, Flaubert y Maupassant, la energía creativa del progreso que explotó a mediados del siglo tras la era romántica. Courbet quiso mostrar la vida tal y como era, con desbordada fuerza realista, en esa época de cambios acelerados.


Se inició con los retratos de personas cercanas y autorretratos como el magistral Desesperado, pintado en el año 1874 (al final de su carrera), la expresividad del mismo es evidente:








Pintó amplios panoramas de la vida en su natal Ornans, como atestigua Un entierro en Ornans de 1849 o El taller del pintor de 1855, obras enormes que son mundos dentro del mundo y parecen tener como objetivo reunir en un sólo espacio la esencia de un pueblo o de un artista lleno de fantasmas.

Un entierro en Ornans


El taller del pintor

El taller del pintor (detalle)




Le encantaba posar para la cámara y a su vez captar a sus contemporáneos por ese novedoso medio que cuestionaba e interrogaba de frente a los propios pintores. Ese contrapunto da una nueva lectura a muchos de los cuadros de Courbet, como ocurre con su amplia obra paisajística y la dedicada a captar animales, caballos, lebreles, peces, aves.

El siglo XIX mostraba su energía con la industria en todo su apogeo, creciendo a toda velocidad, se expresaba en la fuerza de los barcos que cruzaban mares y nuevos canales interoceánicos, en las minas, el crecimiento de las urbes de hierro, la aparición de la locomotora y de los transportes públicos y el inicio de una desbocada globalización a través de la tecnología, que rompía fronteras y naciones y creaba nuevos y voraces imperios. Al mismo tiempo el pensamiento se hacía más positivo y concreto y las ciencias naturales y humanas saltaban hacia otros niveles de conocimiento.

Todo eso puede ser leído en la vasta obra de Courbet, contemporáneo de Baudelaire y del socialista Proudhon, de quienes hizo retratos. En el rostro del Desesperado de Courbet se avistan ya Las flores del mal del gran traductor de Poe y los delirios de Aurelia de Nerval.

Y aunque no quiso pintar las calles modernas de París ni sus grandes edificios, el cambio se percibía en los rostros de burgueses, pueblerinos o bohemios de su época y en los colores y la veracidad de sus imágenes bucólicas y eróticas (Fuente: Eduardo García Aguilar).

Si desean leer su biografía completa, pueden hacerlo en Artehistoria, aunque yo les recomiendo la del Museo d'Orsay, mucho más completa, o la de las Galerías Rehs. En ellas podrán entender mejor el contexto histórico del pintor y su relevancia

"Ninguna época podrá ser reproducida más que
por sus propios artistas,es decir,los artistas que vivieron en ella.
Cada época debe tener sus artistas que la interpreten
y la reproduzcan para el porvenir"

(Gustave Courbet)

Seguidamente, una pequeña muestra aleatoria de su obra:


















































Y como siempre que es posible, un vídeo en el que podemos ver sus excelentes paisajes, denudos, retratos... disfruten de ellos.



Espero que les guste.




domingo, 20 de marzo de 2011

Pintura rápida: Plenairismo


Hablar de la pintura rápida, me recuerda inolvidables clases en la Universidad de Bellas Artes. En estas sesiones, debíamos empezar y acabar un cuadro en el tiempo que duraba clase, unas dos horas. De ahí salieron obras realmente interesantes, ya que son inmediatas, frescas, ponen a prueba la capacidad de observar y trasladar una imágen o una idea al lienzo rápidamente.

HISTORIA

La pintura rápida se asocia con el Plenairismo, o pintura al aire libre, aunque no siempre tiene por qué ser así.
Se denomina Plein air o Plenairismo a la pintura realizada al aire libre con el fin de captar un paisaje y su atmósfera de forma lo más cercana posible a la realidad. El plein air reacciona contra el romanticismo que elaboraba los paisajes y vistas en el taller, extrayendo de diferentes espacios los elementos más sorprendentes y grandiosos del paisaje. Aunque el plenairismo se asocia al impresionismo, pintores anteriores como Turner lo llevaron a la práctica, y maestros impresionistas como Degas lo rechazaron, optando por el taller.
Sería larguísima la lista de artistas reconocidos que han practicado esta técnica de forma magistral en España: Joaquín Sorolla, Ferrándiz, Muñoz Degrain...

Tenemos que hablar inevitablemente de la Escuela de Barbizon. Llamada también de Fontainebleau, fué el precedente del Impresionismo y surgió
hacia 1830 por un grupo de pintores franceses en torno al pueblo de Barbizon,
muy cerca del bosque de Fontainebleau, trabajaban al aire libre y pintaban la
naturaleza de una forma realista, copiando del natural y captando los matices
de luz y el claroscuro atmosférico.

Los principales integrantes de este grupo fueron: Corot, Millet, Rousseau,
Bruandet, Courbet (al que dedicaremos un post completo,ya que es un pintor excepcional en muchos sentidos), Daubigny, Troyon, Díaz de la Peña, Dupré, Coignet, Le Roux,
Harpignies, Chaigneau.

Las espigadoras (Millet)
Escuela de Barbizon

Con ocasión de este nuevo interés por la plasmación del instante fugaz en plena naturaleza, se impulsa el uso de técnicas como la acuarela, que exige la mayor rapidez en la ejecución, aunque también se da un tratamiento muy intelectualizado, como el del impresionismo, que se basa en el estudio de la luz y sus variaciones, llegando al extremo del puntillismo.

Pero volvamos al tema que nos ocupa: la pintura rápida. Es una modalidad que mueve a cientos de pintores, de hecho, hay muchísimas convocatorias de concursos de pintura al aire libre. que son muy populares. Alrededor de ellos hay cientos de artistas que se reúnen en el lugar convenido, con todo su material (lienzo, caja de pinturas, caballete portátil, silla plegable, etc). Durante unas horas realizan sus obras, que quedan en los caballetes para ser expuestos ante el jurado.

Pos esto, a todos los aficionados a la pintura, les animo a participar en alguno de estos concursos, o simplemente a salir a la calle, al campo, a la ventana, e intentar hacer este ejercicio. La pintura rápida nos permite liberarnos de encorsetamientos, nos obliga a ser hábiles y a observar para reproducir lo que nos rodea, pero en poco tiempo. Es divertido, y concursar nos posibilita conocer a pintores realmente extraordinarios así como pasar una jornada divertida.

Hoy les dejo un hermoso vídeo del pintor Carlos de Haes, les gustará, y podrán hacerse una idea del plenairismo. En sus cuadros logra captar el aire, la luz, la temperatura... un genio. También un vídeo cortito sobre un certámen de pintura:





Espero que les guste